lunes, 18 de agosto de 2014

Devocional: ¡Arrepentíos, porque el Reino de los Cielos se ha acercado!

Por: Oriana Espinoza


¿Qué es el arrepentimiento?

Es un acto de humillación ante una necesidad de perdón por causa de una acción que afecta a otros e incluso a uno mismo. 
Arrepentirse trae como consecuencia la redención, es la función de causa y efecto, que nos trae paz y nos ayuda a mantener el equilibrio emocional. También es un hecho espiritual, y uno de los más hermosos cuya recompensa es el perdón. Personalmente, lo que me gusta aún más es que forma parte del mirar atrás y auto evaluarnos, entonces, nos arrepentimos de haber cometido errores, de tomar malas decisiones o no haber dicho las palabras correctas en el momento correcto. Por lo tanto, es un acción que requiere de MUCHA MADUREZ.


Ajá pero... ¿Cómo se arrepiente la gente?
En Levítico 23:32 según la versión NBD "Nueva Biblia al Día" tenemos el siguiente pasaje: "[...]Ustedes se humillarán y expresarán completo arrepentimiento [...]". Así que tenemos tres (3) consideraciones importantes:
  1. Cada día es una nueva oportunidad para arrepentirse: El contexto del pasaje completo nos dice que hay un día para arrepentirse, donde se deben hacer los rituales para el perdón por el arrepentimiento desde que sale el sol hasta que se pone, sin embargo, gracias a la Nueva Ley del Antiguo Testamento, podemos arrepentirnos cualquier día o todos los días, ¡sin ningún ritual!. 

  2. Todo lo que necesitas, está en ti: En los tiempos de Antiguo Testamento, era necesario realizar ante el sacerdote una cantidad de rituales para la expiación de los pecados. Desde la llegada de Jesucristo hasta hoy, que estás leyendo esto, solamente se necesitamos estar convencidos de que no queremos volver a errar y estar dispuestos a doblegar nuestro orgullo, lo que llamamos cristianamente la "humillación del YO", y luego pedir perdón. Pedir perdón primeramente a nosotros mismos, y luego a quienes hemos faltado. A partir de este momento, hacer las cosas bien, ante nosotros, ante quienes nos rodean, y por supuesto, ante Dios.
  3. El arrepentimiento trae LIBERTAD: El no arrepentirse, es vivir esclavizado en la
    mentira, y ser esclavo es carecer de libertad. Dios nos quiere libres y para ser libre, debemos ser consecuentes con la Palabra del Señor; "decía pues, Jesús a los judíos que habían creído en él: Si se mantienen en mi Palabra, serán verdaderamente mis discípulos, y conocerán la verdad y la verdad les hará libres”(1). Jesús, nos otorga la gracia de liberarnos de la esclavitud del pecado, para eso debemos comenzar por el arrepentimiento, es así como Jesús respondió a los judíos: “En verdad, en verdad les digo: todo el que comete pecado es un esclavo. Y el esclavo no se queda en casa para siempre; mientras el hijo se queda para siempre. Sí, pues, el Hijo les da la libertad, serán realmente libres”. Es así, como la Biblia enseña que el arrepentimiento es el camino hacia la libertad. 
Entonces, ¿El arrepentimiento es un mandato de Dios?.

Arrepentirse, sin duda que es un mandato de Dios. Él nos mandó a reflexionar sobre nuestros pecados y reconocerlos, a dejar de ser infieles a El y a nosotros mismos, y regresar a sus brazos sinceramente. Es necesario arrepentirnos de nuestras malas obras y dejarlas atrás, preparando el camino para recibir las bendiciones que El nos da por hacer el bien(2). 

En el evangelio, el arrepentimiento genuino es de gran importancia, es CLAVE para el bautismo en agua de cada nuevo creyente, porque nos permite reflexionar en hacer buenas obras, predicar el evangelio a través de nuestro propio cambio (testimonio) y ser bautizados por el Espíritu Santo. Sin embargo, el arrepentimiento no es "color de rosa", no es fácil, es doloroso; Pero pensemos: ¿A quién le gusta equivocarse?, ¡a nadie nos gusta reconocer que hicimos mal, que podemos fallar, que somos imperfectos!. Alegrémonos porque cada día es una oportunidad para arrepentirnos por algo distinto, porque cada dolor ha sido necesario para crecer y madurar en la fe, y que cada cicatriz emocional sirva para recordarnos que no podemos permitirnos volver atrás.
Jesucristo Dijo: "Arrepentíos!, porque el Reino de los Cielos se ha acercado".
Preparemos el camino del Señor en nuestras vidas, permitámonos ser bendecidor para bendecir. 


Gracias por leerme, aquí hay un lugar para ti. 
Bendiciones Totales. 


*Referencias 
1.- (Juan 8, 31-32, Juan 8, 34-36).
2.- (Isaías 22:12 , Jeremías 3:10 , Jonás 3:5-10)

Versículos Clave para este devocional:
A.T
1) Levítico 23:32
2) Isaías 22:12
3) Jeremías 3:10
4) Jonás 3:5-10

N.T
1) Mateo 3:2 , 4:17
2) Hechos 19:4 , 26:20
3) 2Corintios 7:9